Durante este
siglo, Lyon experimenta un crecimiento quasi-exponiencial, puesto que pasa de
35.000 hab a finales del s. XVI, a 45.000 en el primer tercio del s. XVII y alcanza
los 90.000 a principios del XVIII.
Es ahora, que
dada la falta de espacio para el crecimiento, los lioneses ‘invaden’ la
Presqu’Île, siendo las clases acomodadas las primeras en mudarse entorno a la
place Bellecour, la cual se constituye como la plaza real.
LA CIUDAD Y EL REY.-
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Henri IV |
Al final de
las guerras de religión, Enrique IV, que no se fía de Lyon, disminuye el poder
de su consulado (~ayuntamiento).
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Louis XIII |
Tras él, Luis
XIII, faculta al Gobernador, quien representa el poder real a nivel local.
Además, para garantizar sus privilegios, la ciudad corteja al rey con una gran
cantidad de fiestas: entradas reales, las grandes fiestas en honor de los reyes
en cada una de sus visitas.
Enrique IV
fue recibido con gran pompa en varias ocasiones. En 1600 llegó a Lyon para
celebrar su matrimonio con María de Médicis. Estas entradas también son una
oportunidad para que los reyes entren en escena y puedan mostrar su poder sobre
la ciudad.
La Place
Bellecour se convierte en la plaza de Luis el Grande en honor de Luis XIV, cuya
estatua ecuestre se dio a conocer en el centro en diciembre de 1713, como se
muestra en la tabla de Carlos Grandon.
Paradójicamente,
cuando el poder local está más sujeto a la autoridad real que el consulado adquiere
un hotel urbano de lujo (Hotel de la Ville).
POLÍTICA Y RELIGIÓN.-
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Camille de Neuville |
Después de un
breve episodio protestante, se comenzó reconquista católica en Lyon, y los arzobispos
sucesivos, especialmente Camille de Neuville, aplicaron la reforma tridentina, junto
a las medidas tomadas en el Concilio de Trento en Italia.
Los sermones,
las procesiones, la predicación y la peregrinación a Notre Dame de Fourvière se
multiplican, promoviendo la instalación de nuevas congregaciones como los
capuchinos, o los Carmelitas.
La orden de
los jesuitas se recibió la dirección de la única institución de educación
superior en la ciudad, el colegio de la Trinidad, la cual fue reconstruida por el
Padre Martellange.
En fin, lo
que viene a ser que desde la Iglesia católica se promueven movimientos,
situaciones o condiciones para la propagación de la fé (s/n la misma) con el
fin de convertir a los protestantes al catolicismo. Lo que se consuma en un
hecho a finales del s. XVII, cuando la reconquista espiritual en Lyon se da por
terminada.
FABRICACIÓN DE LA SEDA.-
El origen del
comercio de la seda en Lyon nace cuando en 1536, Francisco I concedió los privilegios
para la fabricación de tejidos de seda al italiano Etienne Turquet.
La Gran Fábrica
de la seda alcanza su mayor expresión durante la segunda mitad del s.XVII gracias
a la resolución de Colbert. La organización comercial y social que deriva de
esta situación se prolongó hasta el siglo 19.
Tres grupos
de comercio coexisten: el comerciante-fabricante, a menudo asociado con
el artista, compra la materia prima y se encarga de la comercialización de los
tejidos, mientras que los maestros se dedican exclusivamente a la
fabricación. Los talleres son pequeñas unidades familiares en las que algunos
compañeros ayudan a los maestros de los trabajadores. Ellos son dueños de sus
propios negocios. Tanta actividad provocó que se alcanzara entorno a los 14.000
puestos de trabajos directamente relacionados con el negocio de la seda.
La Seda es el
medio de vida de un tercio de la población de la ciudad, llegando su influencia
más allá del área urbana. Es entonces cuando Lyon se convierte en la ciudad de
la seda!
Y para que no olvidéis, diciembre se acerca, recuerdos de la Fête des Lumières 2012...